Si tienes una página web seguramente habrás oído hablar del famoso y codiciado SEO (del inglés search engine optimization). Pues el SEO es exactamente eso, optimizar una web, desde su estructura hasta su contenido, para facilitarle la labor a los motores de búsqueda (Google, Bing, DuckDuckGo, Yahoo, etc...) e intentar aparecer el primero en los resultados de búsqueda. Esa optimización se consigue diseñando un sitio web limpio, bien estructurado, con enlaces fiables, contenido interesante, seleccionando únicamente los metatags adecuados, y consiguiendo un flujo constante y creciente de visitas reales y enlaces externos desde sitios verificados y con alta credibilidad.
Podemos decir que hoy día el SEO es el nivel de fama y credibilidad que tiene tu sitio, y mediante el cual consigue aparecer más cerca de las primeras posiciones en los resultados de búsqueda relacionados con su contenido. El SEO no es algo que se pueda comprar o que se pueda garantiza en un contrato.
SEO no es pagar por publicidad, ni hacer magia negra ni trucos de aprendiz de hacker para adelantar a la competencia y "ganarles" en los resultados de búsqueda, o incluir 500 hastags o metatags en cada página, ni hacer uso de "herramientas" que crean falsas visitas y falsos enlaces hacia nuestro sitio, ni hacer campañas de spam con publicidad engañosa y fraudulenta.
Seguramente os habrán contactado "empresas especializadas en posicionamiento web" prometiendo las primeras posiciones en los resultados de búsqueda a cambio de un módico precio. Pues tenéis que saber que todo eso es una estafa. Hace años quizás se podía engañar a los motores de búsqueda con trucos y enlaces falsos, pero hoy en día la cosa ha cambiado mucho; puede que algunas de estas empresas os consigan posicionar los primeros para ciertos términos de búsqueda, pero os aseguro que será solo temporal, tal vez un par de meses como mucho, hasta que el motor de búsqueda actualice las bases de datos, haga limpieza y acabe penalizando vuestra web eliminándola para siempre de las primeras páginas de búsqueda.
¿No lo crees? Es fácil: imagina 10 empresas del mismo sector que paguen a la misma "empresa especializada en SEO" por aparecer los primeros en los mismos términos de búsqueda. ¿Cual de los 10 se quedaría con la primera posición? La empresa ha prometido a los 10 la primera posición, pero sólo puede haber un ganador... Efectivamente, ninguno será el primero, como mucho que alguno consiga la 5 o 6 posición, porque al final son los algoritmos del buscador quienes seleccionan las posiciones, y a los algoritmos no se les puede comprar.
Una web que no se actualiza en meses se considera una web muerta, y pierde posiciones en los buscadores, posiciones que luego son muy difíciles de recuperar. Una web que copia contenidos o que no tiene una buena estructura es una web poco profesional, pierde credibilidad y también perderá puntos en la competición de los buscadores. Una web que hace campañas de spam, acabará en la lista negra de servidores de correo electrónico, y por tanto será eliminada de los buscadores. Una web que usa publicidad fraudulenta y necesita visitas automatizadas y enlaces falsos acabará siendo etiquetada como fraudulenta , y en la lista de los buscadores.
Como he dicho antes, el SEO es una combinación entre fama y credibilidad, y ninguna de las dos se pueden comprar, hay que ganárselas. El único truco para conseguir un buen posicionamiento, duradero y estable, es una web bien hecha y estructurada, contenido de calidad, constancia y paciencia. No caigáis en las estafas de esas empresas que prometen buenas posiciones mediante campañas absurdas y metodologías dudosas, porque realmente el posicionamiento no se puede comprar, si fuera así, los motores de búsqueda perderían su credibilidad.
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